La bebida espirituosa con mayor crecimiento en los últimos años
Existen numerosas variaciones en la elaboración del Ron, según donde este se produzca, entre otras cosas; dando lugar a rones con diferentes colores y sabores, aunque siempre con un paladar característico.
Según el CE 110/2008, en Europa, se entiende por ron la bebida espirituosa producida de la fermentación alcohólica y la destilación de melazas, de jarabes procedentes de la elaboración de azúcar de caña, del propio jugo de la caña de azúcar o de una mezcla de estas 3 materias primas.
Destilado a menos de 96% vol., de forma que presente las características organolépticas específicas del ron, con un contenido en sustancias volátiles superior o igual a 225 g/hl de alcohol de 100% vol. este producto debe contener al menos un 37,5% vol. alcohol y no se le pueden añadir alcoholes, aromatizantes, ni otras sustancias que no sean caramelo, utilizado para adaptar el color.
Entre los rones encontramos una amplia diversidad. Se pueden distinguir en función del proceso de producción: industrial o agrícola; de la materia prima: caña de azúcar y melazas; de las levaduras utilizadas para su fermentación: natural o cultivada; del tiempo de fermentación (desde unas doce horas hasta 12 días); del proceso de destilación utilizado: alambique o columnas de destilación.
También es distintivo el color y, por supuesto, el tiempo de envejecimiento. No obstante, dividir el ron por tipos o edades es complicado, ya que se produce en muchos países, cada uno tiene su propia legislación y no existe un acuerdo para una clasificación estándar, por los que encontramos diversos términos, que no siempre se pueden usar como elemento diferenciador. Por eso en Vinos y Alcoholes preferimos diferenciarlos por su origen.