Cognac y Armagnac, destilados prestigiosos y apreciados en el mundo.
El brandy francés es reconocido a nivel mundial por su refinamiento, calidad y fidelidad a los métodos tradicionales de elaboración, especialmente en las prestigiosas regiones de Cognac y Armagnac. Solo puede llevar estos nombres si proviene de dichas zonas específicas de Francia, cumpliendo estrictas normativas sobre las variedades de uva empleadas y los procesos de producción.
Destilación:
El Cognac se somete a una doble destilación en alambiques de cobre, lo que le confiere una textura suave y aterciopelada. Debe envejecer al menos dos años, aunque los productos de alta gama superan con creces ese tiempo. Respecto al Armagnac, suele destilarse una sola vez en alambiques continuos, lo que da como resultado un perfil más robusto, complejo y rústico.
Ambos envejecen en barricas de roble francés, que aportan elegancia y matices sutiles sin enmascarar la expresión natural del destilado, a diferencia del roble americano.
Perfiles sensoriales:
El Cognac destaca por sus notas de frutas secas, especias suaves y un fondo amaderado refinado.
El Armagnac revela aromas de ciruela, albaricoque, vainilla y una boca más intensa y persistente.
Ambos tipos de brandy conservan el equilibrio entre la fruta y la madera, mostrando recuerdos a coco, vainilla y uva madura, gracias al uso sutil del roble francés. El brandy francés se envejece de forma estática, permitiendo una evolución controlada, homogénea y precisa en cada barrica.
Edades disponibles: desde 6 meses hasta 20 años. Consulta otras edades.